Estas casas están situadas en la Huerta de Legamarejo y fueron construídas hacia 1875, pues ya en ese año se informaba de la visita real a la yegüada, el herradero y otras dependencias anejas. Su historia está muy ligada a la evolución de la Real Yegüada, que llegó a tener hasta 575 ejemplares en el año 1903.
Aunque siempre se distinguió la sólida construcción de mampostería y ladrillo de las Casas de Legamarejo y sus magníficas cuadras, nunca se han podido comparar a la Casa de la Monta. La Real Yegüada disfrutó de una gran época de esplendor durante el reinado de los Austrias (Felipe II, Felipe III y Felipe IV), decayendo posteriormente durante el reinado de Carlos II y renaciendo de nuevo durante los reinados de Fernando VI y Carlos III (Borbones). Tras varios periplos, será finalmente Alfonso XII quién reorganice la Yegüada, ordenando la construcción de varias edificaciones en el Soto de Legamarejo para albergar la Sección Inglesa.
Aún quedan en pié un conjunto sobradamente testimonial de edificaciones que evocan un legado constructivo de estilo neomudéjar.
Así mismo es digna de destacar la rotonda de entrada a la finca, perfectamente integrada en el trazado y diseño de los jardines y huertas de Aranjuez, completada con un extenso muro de cerramiento que protegía las Huertas Grandes de los fuertes desbordamientos del Jarama, y cuya construcción fue realizada por orden del 1 de Julio de 1756.
Dicha rotonda es similar a la de las Doce Calles, Plaza Cirigata y la entrada principal frente al jardín de la Isleta, estando dotadas de las correspondientes Casas de Guardas. De su construcción apenas quedan vestigios de vallados y apilastrados de ladrillo, habiendo desaparecido por completo las puertas con verjas de madera.
Actualmente, la finca es de propiedad privada.
Foto: Album Guía de Aranjuez (Edit. Doce Calles)
Foto: Foro Xerbar
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